La Administración del Seguro Social (SSA) publicó en el Registro Público una disposición en concordancia con las políticas migratorias del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) para restringir el pago de beneficios a inmigrantes indocumentados que hayan sido deportados o hayan salido voluntariamente de los Estados Unidos.
“Este acuerdo… establece los términos, condiciones y garantías bajo las cuales el DHS divulgará información a la SSA para identificar a los extranjeros que salen de los Estados Unidos voluntariamente y a los extranjeros que son expulsados”, indica el documento.
Agrega que esos inmigrantes podrían ser sujetos a la suspensión de pagos o al rechazo de solicitud del beneficio.
“Estos extranjeros pueden estar sujetos a la suspensión de pagos o la falta de pago de beneficios o ambos”, advirtió la agencia. “La SSA utilizará los datos del DHS para determinar si es aplicable la suspensión de pagos, la falta de pago de beneficios o la recuperación de pagos en exceso”.
La nueva política recibirá comentarios hasta el 19 de enero del 2020. Después de ese periodo se revisarán los comentarios y se emitirá una regla final.